El Concejo Deliberante de Puerto Santa Cruz sancionó la creación de la ordenanza de “Licencia por Menstruación” en el ámbito municipal. Se establece que las “personas menstruantes” podrán hacer uso de la mencionada licencia con goce de haberes, una vez al mes siendo un total de 12 anuales no acumulativas con aviso al responsable del área donde se desempeñen funciones con 15 minutos de anticipación, sin necesidad de presentar certificado médico y no habiendo posibilidad de que la solicitud sea denegada.
La autora de la iniciativa, Carla Contreras señala en los fundamentos del proyecto que “hablar de menstruación aún sigue siendo un tabú en nuestra sociedad a pesar de encontrarnos en el siglo XXI y en muchos casos las personas menstruantes han naturalizado los dolores producto de la menstruación asistiendo a sus lugares de trabajo con un nivel de rendimiento bajo y estrés propios del malestar que genera el dolor” además sostiene que “hablamos de personas menstruantes teniendo en cuenta mujeres, varones trans y personas no binarias”.
Posterior a su sanción, en sus redes sociales la edil indicó: “la iniciativa y el alma de este proyecto es ampliar los derechos ya adquiridos dentro del ámbito Municipal y no limitarlos. Esta licencia menstrual no busca poner en situación de debilidad a las personas menstruantes sino que se comprenda que los síntomas menstruales en muchos casos son incapacitantes“.
“El objetivo es poner sobre la mesa la menstruación y además entenderla como parte de mi labor como Concejal y también para dejar de naturalizar que no podemos dejar hacer un stop por el dolor. Es necesario darle un marco normativo a la menstruación que es fisiológica en las personas menstruantes” indicó Contreras.
“Los cambios culturales llevan años, luchas y debates. No nos olvidemos que no hace mucho la mujer no podía votar, que hubo un mundo donde la segregación racial era ley. Que hasta hace poco la cuestión de género no se contemplaba. Que la unión civil entre personas del mismo sexo no existía. Este proyecto es para dotar de una herramienta más para aquella persona que la pasa mal. Si no compartis, está perfecto. Pero no te cierres a derechos que le van a mejorar la vida a otras personas” concluyó la concejal en defensa de la iniciativa.
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