BSS: El Nu Metal en la Zona Norte de Santa Cruz
- Santa Cruz Nuestro Lugar

- 28 sept
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Si alguien te dice que en la Patagonia profunda no hay pogo, que en la estepa solo suenan los vientos cruzados y los motores de las petroleras, contestale con tres letras: "BSS". Ba Sing Se, banda de Pico Truncado que desde 2018 viene agitando el avispero con un sonido que mezcla nu metal y metalcore, como si en el medio del desierto hubieran plantado un escenario de Woodstock al palo.

La movida nació en Truncado, ciudad obrera, áspera, donde la calle te curte y el frío te enseña a no dormirte. En ese contexto, un grupo de pibes decidió sacudirse la modorra de la rutina y clavar riffs pesados con la misma bronca con la que ahora se putea a Milei. Y ojo: no es chamuyo. El que escucha sus temas en Spotify o iTunes —"Puzzle", "Impulso Destructivo" y "Gravity"— entiende que acá no hay pose: hay laburo, hay búsqueda y hay ese gustito a catarsis que solo el metal bien tocado te regala.
El nombre de la banda viene con data ñoña: Ba Sing Se es la ciudad impenetrable de la serie animada "Avatar: La Leyenda de Aang", un lugar mítico, lleno de muros que parecen indestructibles. No lo sacaron de Los Ángeles ni de Londres, lo sacaron de un universo que los marcó, donde la resistencia y el aguante son ley. Y tranqui: ese guiño freak no les saca ni un gramo de violencia sonora; al contrario, les da identidad, algo que en la escena del under siempre vale oro.
Con cada tema, BSS suena como un cachetazo en la cara de la monotonía. "Gravity" te arrastra como un derrumbe en cámara lenta; Impulso Destructivo es pura adrenalina; "Puzzle" funciona como el soundtrack de cualquier pibe de zona norte que se siente partido entre quedarse o rajar.
La formación actual está integrada por cuatro gladiadores del ruido: Lucas Lobos (@lucas_lobos26), Alex Zeta (@alex.zeta_), León Gervan (@leon.e.gervan_), y Walter Sanchez (@walt_22v). Cuatro chabones que, con riffs, gritos y baterías como martillazos, levantan un muro sonoro que no deja pasar ni un rayo de rutina.
Lo más loco es que desde Truncado, una ciudad que apenas aparece en el mapa cuando hablás de rock nacional, estos flacos están metiendo ruido en plataformas globales. Se mueven en redes, suben material a YouTube, y cada tanto sueltan esas frases que son grito de guerra: "Stay Metal. Stay Safe". Como si dijeran: “loco, la vida se complica, pero mientras tengamos un riff, no hay sistema que nos duerma”.
Y sí, capaz nunca toquemos un Lollapalooza en Río Gallegos, pero cuando la BSS sube al escenario y la bata arranca, ahí mismo en Pico Truncado, la Patagonia se convierte por un rato en Ba-Sing-Se: un lugar inexpugnable, blindado contra la rutina, donde lo único que manda es el golpe de la distorsión y el aguante del pogo.
Gracias a esta banda, en Santa Cruz no tenemos nada que envidiarle a los monstruos del nu metal yankee. Porque posta, cuando Ba-Sing-Se rompe la bata y la viola entra a degüello, la cosa suena tan demoledora como un Korn en pleno ’98, tan cargada de bronca como un Limp Bizkit en el peak del Family Values Tour, tan oscura y filosa como un Slipknot reventando Iowa, y con la misma crudeza melódica que un Deftones en Around the Fur.
Acá abajo, en la estepa, el pogo no se achica: con BSS, Truncado tiene su propio capítulo en la historia global del nu metal.
Por @fernandocabrera




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